Sunday, October 26, 2008


En vista del derrumbamiento mental que provoco en mi la partida de ayer, y otros sucesos, que también afectaron al resultado de la partida de ayer, aunque uno intenta concentrarse en el juego, pero no es posible, cuando otros pensamientos, otras circunstancias alteran nuestra mente, decidí (esta mañana) ir a pasear por la city (BCN) y releer el libro de Kasparov, mientras disfrutaba de un viaje en ferrocarril, pues la torticulis sufrida esta noche por una mala postura o por la tensión acumulada en mis cervicales, me ha dejado sin poder mover demasiado mi cuello y en estas circunstancia es preferible no conducir. Debo decir que la lectura me esta sentando como una inyección de moral al estilo terapia floral de Bach acelerada (Rescue remedy) y espero que así siga.


Hace unos días (12 de octubre de 2008) pedí un producto a una empresa alemana(Geo-vital) y me dijeron que en 3/8 dias recibiría mi producto. ellos entregaron el producto a la empresa DHL el 14 de octubre y a estas fechas no ha llegado. Realmente he recibido varias disculpas de la empresa Geovital, pero es totalmente incompresible la tardanza de la empresa DHL, realmente ni que repartieran en tortugas sus productos.
Cuando nuestras preocupaciones, nuestros pensamientos nos alterarán, nos entristecen, sean por el motivo que sea uno se encuentra entre el cielo y la tierra, y hasta que nos se calme la situación, no se produzca un cambio a nuestro favor, seremos derrumbados en un mar de tristeza y aunque intentemos hacer la película mental lo más pequeña que podamos, tan infima que no tenga cabida en un mundo imaginario, no podemos, pero siempre nos queda la música de kitaro para reflexionar.

La partida de hoy , ha sido nefasta, aunque no en todos los momentos, pero si en el momento final. Cuando no nos concentramos sobre lo que amenaza el rival, y solo pensamos en nosotros y hemos tenido otras preocupaciones y nos quitan el sueño, se suelen hacer malas partidas y pierdes como si jugaras con las manos pringosas de aceite y tus piezas son conducidas por hipnosis al mate. y más todavía si uno se halla en la mesa 13. si puede que me lleve la sugestión a la perdición,pero no me gusta ese número, y encima las cosas no funcionan bien, en fin...malos tiempos para jugar al ajedrez y malos tiempos para la lírica (por hacer un simil con una canción de un grupo español).